Hierro dextrano

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El hierro dextrán desempeña un papel crucial en la ganadería moderna, especialmente en la cría de lechones. Al prevenir la anemia ferropénica, contribuye a asegurar un crecimiento saludable de los animales y a alcanzar los estándares de productividad requeridos en la ganadería comercial. Cuando se usa de forma responsable y en conjunto con buenas prácticas de manejo animal, el hierro dextrán es una herramienta valiosa para mantener la salud y el bienestar del ganado.

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Descripción

El hierro dextrano es un complejo de hidróxido férrico y dextrano, un polisacárido (molécula de azúcar). Esta formulación permite que el hierro se almacene y se libere lentamente en el organismo del animal. Generalmente se presenta en forma de solución inyectable, a menudo como hierro dextrano de 100 mg/ml o 200 mg/ml, y se administra por vía intramuscular o subcutánea.

¿Por qué se utiliza en la agricultura?
Prevención de la anemia en lechones:

Los lechones a menudo nacen con bajas reservas de hierro y la leche de la cerda es naturalmente baja en hierro.

En la cría comercial de cerdos, los lechones no tienen acceso al suelo, que de otro modo sería una fuente natural de hierro.

El hierro dextrán generalmente se inyecta en los lechones durante los primeros días de vida (a menudo entre el día 1 y 3) para prevenir la anemia por deficiencia de hierro, que puede causar letargo, crecimiento deficiente y alta mortalidad si no se trata.

Apoyo para terneros y otros animales de granja:

También se puede utilizar en terneros, corderos y otros animales bajo ciertas condiciones, particularmente si son criados en ambientes con baja exposición al hierro natural o cuando muestran signos clínicos de anemia.

Crecimiento y productividad mejorados:

Los niveles adecuados de hierro favorecen la producción de glóbulos rojos y el transporte de oxígeno, lo que a su vez promueve mejores tasas de crecimiento, función inmunológica y salud general.

Mecanismo de acción
El hierro es un componente esencial de la hemoglobina, la molécula de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno. El hierro dextrán proporciona un depósito (o almacenamiento) de hierro que se absorbe lentamente en el torrente sanguíneo con el tiempo. Una vez en el organismo, el hierro se utiliza en la síntesis de hemoglobina, la función enzimática y el metabolismo energético.

Dosis y administración
Lechones: una dosis común es de 100 a 200 mg de hierro administrados como una única inyección intramuscular.

Terneros y corderos: la dosis varía según el peso, la gravedad de la deficiencia y la orientación veterinaria.

Las inyecciones generalmente se administran en el músculo del cuello para evitar dañar cortes valiosos de carne.

Precauciones y efectos secundarios
La sobredosis puede provocar toxicidad, especialmente en animales pequeños o débiles.

Las reacciones pueden incluir hinchazón en el lugar de la inyección, tinción del tejido o, raramente, reacciones anafilácticas.

Se debe tener cuidado con los animales que tienen deficiencia de vitamina E o selenio, ya que las inyecciones de hierro pueden aumentar el estrés oxidativo en tales casos.

Alternativas y consideraciones
Si bien el hierro dextrán sigue siendo el método más común de suplementación de hierro en lechones, otros enfoques incluyen:

Suplementos de hierro orales (menos efectivos debido a limitaciones de absorción).

Alimentos fortificados con hierro (útiles pero no suficientes para los recién nacidos).

Enriquecimiento ambiental (como el acceso al suelo en sistemas extensivos, que puede reducir la necesidad de suplementación).

Sin embargo, ninguno de ellos actúa tan rápido ni es tan confiable como el hierro dextrán inyectable, especialmente en sistemas de producción intensiva.

Regulación y tiempos de retiro
El hierro dextrán se considera generalmente seguro y no requiere un período de espera en la mayoría de los países, lo que significa que los animales tratados con él pueden ser sacrificados sin espera. Sin embargo, las regulaciones pueden variar según el país, por lo que siempre es importante consultar las directrices locales y a un veterinario colegiado.